400 personas de las diferentes PAHs del Estado se dan cita en Barcelona para celebrar una asamblea estatal en el quinto aniversario del movimiento.
Reproducuimos el artículo publicado hoy en el blog Contrapoder de eldiario.es por Ada Colau y Adrià Alemany con movivo de #5añosDePAH
Ada Colau y Adrià Alemany
Este sábado 22 de febrero se celebrará en Barcelona la asamblea estatal de las Plataformas de Afectados por la Hipoteca (PAH), en la que se esperan unas 400 personas. Tras la asamblea, celebraremos el 5º aniversario de la PAH. A la cita están convocadas las más de 200 PAH’s hoy existentes y aunque por motivos económicos no todas podrán acudir, de un modo u otro todas estarán presentes.
Más de 1000 desahucios parados. Se dice rápido. Más de 1000 personas realojadas por la Obra Social de La PAH. Miles de daciones en pago, condonaciones y alquileres sociales conseguidos en estos años, conquistados con gran esfuerzo, batallando caso a caso, semana tras semana, gracias a miles de heroínas y héroes anónimos que se dejan la piel en este movimiento. Da vértigo mirar hacia atrás y ver todo lo que hemos logrado: cosas que hace cinco años nos decían que eran imposibles. El respaldo de la opinión pública. Una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) por la dación en pago y el alquiler social que recogió un millón y medio de firmas. El apoyo de los jueces, del Parlamento Europeo y hasta de Naciones Unidas. Nuestra denuncia ha llegado a la prensa internacional, desde el New York Times o la BBC hasta Al Jazeera, pasando por Japón, Rusia o Finlandia.
Sin embargo no podemos ser autocomplacientes. A pesar de todas las “pequeñas grandes victorias” de las PAH, aún no hemos logrado cambiar la ley en el sentido de los mínimos recogidos en la ILP. A pesar de llevar ya acumuladas quinientas mil ejecuciones hipotecarias, siguen aumentando los desahucios, con una banca rescatada y sobreprotegida por los poderes públicos. El sistema es estructuralmente corrupto y la puerta giratoria entre los ministerios y los consejos de administración no ha dejado de funcionar, a costa de aumentar la desigualdad y los recortes en servicios básicos. El robo y el expolio se han instalado oficialmente en nuestras administraciones, bajo la forma contemporánea de la esclavitud llamada “deuda”.
Eppur si muove. Aunque pueda sonar a provocación, o a ingenuidad, nos atrevemos a afirmar que la PAH ya ha ganado. Ha ganado porque ha logrado lo más difícil: romper la versión oficial que nos condenaba a la soledad, al miedo y a la fatalidad. Una sociedad deprimida y culpabilizada no se moviliza, y eso el poder lo sabe. Por eso nos repetían todo el día grandes mentiras como que “los españoles hemos vivido por encima de nuestras posibilidades”, “tenemos lo que nos merecemos”, “hay políticos corruptos porque en este país ya se sabe que todo el que puede roba” o el clásico “no hay alternativa”. Pero de repente, como en el cuento de Andersen, los niños empezamos a gritar “el rey está desnudo” y todo cambió. En alianza con otros colectivos y con el maravilloso efecto multiplicador del 15M, hemos gritado “no es una crisis, es una estafa”, y hemos demostrado que sí se puede: Que somos mayoría, y si nos organizamos, tenemos mucho más poder del que nos habían hecho creer.
En los últimos tiempos, distintas personas y colectivos nos han preguntado, ¿cuál es la receta de la PAH? Aquí no podemos extendernos, pero ahí van algunas ideas:
Pero la PAH no es un episodio acabado, todo lo contrario: es un proceso abierto con múltiples retos. Por un lado retos internos: se trata de un movimiento popular que ha crecido mucho en muy poco tiempo, sin recursos, con múltiples urgencias y presiones. Ahora es tiempo de consolidar las PAH, y practicar la democracia siendo capaces de articular formas de organización grandes y complejas, a la vez que abiertas, horizontales y ágiles. Por otro lado, retos externos: frente al bloqueo institucional del PP, que ha abusado de su mayoría absoluta para despreciar el clamor ciudadano contra los desahucios, que no ha dudado en tratar de “filoterroristas” y “nazis” a quienes de forma pacífica reclamábamos algo tan básico como derechos humanos y democracia… ¿qué hacer?
Cinco años después, quienes en febrero de 2009 empezamos la PAH en Barcelona, seguimos sin acostumbrarnos a la barbarie, y seguimos emocionándonos con cada victoria arrancada a la avaricia y la prepotencia de los bancos. En las PAH lloramos cada semana. Lloramos de rabia y dolor, cuando escuchamos los relatos de quienes acuden por primera vez a una asamblea y explican su vía crucis de meses sin dormir, de amenazas y presiones del banco, de tensión familiar, y de cosas aún peores. Pero lloramos cada vez más de alegría, escuchando a quienes no hace mucho llegaron derrotados y enmudecidos, y hoy explican a los nuevos que gracias a la PAH han logrado la dación o el alquiler social. Las PAH son un espacio rebosante de vida, donde cada día aprendemos, luchamos y nos sentimos como si fuéramos una familia. De hecho, en nuestras acciones y asambleas siempre haya niñas y niños correteando. Y que así sea siempre. Ellas y ellos más que nadie nos recuerdan que el horizonte está abierto y la historia por escribir.
Gracias a todas las PAH, por conquistar la esperanza y devolvernos el futuro.
By Ada Colau and Adrià Alemany
On Saturday, February 22nd, the Platform for People Affected by Mortgages (PAH) will hold its countrywide assembly in Barcelona with more than 400 participants. The PAH will also be celebrating its 5th founding anniversary. The more than 200 PAH nodes across Spain are invited to the meeting. Though some of them won’t be able to physically be in Barcelona due to economic reasons, one way or another, they will all be present.
More than 1,000 evictions stopped. Sounds easy when said fast. Over a 1,000 people rehoused through the PAH’s Obra Social. Thousands of people have cancelled their mortgage debt after foreclosure1, been granted debt forgiveness for homes already repossessed, and obtained social housing in the millions of empty houses that banks collect in Spain. This has been accomplished thanks to great effort, fighting each family’s case, week by week, thanks to thousands of anonymous heroes and heroines who put their heart and souls into this movement . Looking back on all that has been accomplished is breath-taking. Five years ago, many of these things were unthinkable: General public’s full support, a People’s Legislative Initiative (ILP) to change Spain’s draconian mortgage laws signed by over a million and a half citizens, the backing of our demands by thousands of judges across Spain, even the European Parliament and the United Nations have backed us up. What we are denouncing has reached the international press, from New York Times or BBC, to Al Jazeera and places from Japan, to Russia or Finland.
But we cannot be complacent. Despite all our “small big victories,” we have yet to change the law to include at least the minimum requirements the PAH made through its ILP. Over five hundred thousand mortgage foreclosure processes have been issued throughout Spain and evictions continue to increase at the hands of a bailed-out banking system shielded and sheltered by government. The system is structurally corrupt and the revolving door between cabinet ministers and high-profile administrative councils hasn’t ceased to work. In exchange inequality has sharply increased and we’ve seen nothing but heavy spending cuts in basic services. Theft and looting have officially been installed in our government, under the contemporary form of slavery called “debt.”
Eppur si muove. It may sound like a provocation, or maybe naiveté, but we dare to say that the PAH has already won. It has won because it has accomplished the most difficult task: break with the hegemonic discourse that condemned people to solitude, fear and fatality. A depressed and shamed society doesn’t mobilize, and power knows this. It is precisely why they repeated nonstop the biggest lies about “Spanish people have lived beyond their means,” “we have what we deserve,” “there are corrupt politicians because in this country it is well known that whoever can rob will do so” or a classic “there is no alternative.” But all of a sudden, just like in Andersen’s story, children started yelling “the king is naked” and everything changes. In alliance with other collectives and with the wonderful multiplying support of the 15M, we have changed the message “it is not a crisis, it is a scam.” We have demonstrated that it is possible, that Yes! We can, we are the majority, and if we organize, we have much more power than they’ve made us believe.
In recent times, different people and social collectives have asked us what is the recipe for the PAH’s success? Without going into detail, here are a few ideas of what’s worked for us:
But the PAH is a work-in-progress, it is a growing process with multiple challenges. On the one hand internal challenges: it is a grassroots movement that has grown very quickly, without resources, with multiple urgent needs and pressures. Now is the time to consolidate the PAH, and practice democracy by articulating large and complex forms of organization, that are open, horizontal and agile. On the other hand, external challenges: in light of the Popular Party’s (PP) institutional deadlock through its abused of absolute majority in congress and by ignoring citizen’s outcry against evictions, a PP who has not hesitated to call “filo-terrorists” and “Nazis” those who were demanding peacefully something as basic as human rights and democracy… what shall we do? For starters,
Five years later, those who in 2009 started the PAH in Barcelona, are still not used to this barbarity, we continue to thrill with each victory ripped from greedy and prepotent financial system. At the PAH, we cry every week, of rage and pain when we hear the stories of those who step into our assemblies for the first time and explain their ordeal of months without sleep, threats and pressures from the bank, family stress, and worse. But increasingly we cry of joy; watching the transformation of those who not-long-ago seemed defeated and subdued are nowadays those who explain to newcomers what they have achieved thanks to the PAH, be it debt liberation after repossession and/or social rent. The PAH is an overflowing and lively space, where each day we learn, we fight and we feel like we were a family. In fact, in our daily actions and meetings there are always children running around. And that’s the way we want it to be. They are, more than anyone, the ones who remind us that our horizon is open and our history is still to be written.
Thanks to each and every PAH, for renewing our hope and restoring our future.
Artículo de Adrià Alemany, miembro de la PAH y coautor del libro Vidas Hipotecadas : De la Burbuja inmobiliaria al Derecho a la Vivienda
Con la nueva reforma financiera anunciada por el Ministro de Guindos (la quinta desde que estalló la crisis, y la tercera desde que gobiernan los populares) se obliga a las entidades financieras perceptoras de ayudas públicas a deshacerse de los inmuebles adjudicados en cartera. Para ello se crearán sociedades gestoras (banco malo), participadas por el FROB, que compraran los activos tóxicos que se acumulan en los balances bancarios para venderlos en un plazo máximo de 15 años. Con ello se pretende sanear las cuentas de las entidades financieras de la indigestión inmobiliaria. De esta manera el FROB, que podrá endeudarse hasta un tope de 120.000 millones de euros, financiará la compra de estos activos tóxicos, mayormente inmuebles que actúan como garantía de créditos ligados a promotor, según el propio ministro de economía. El gobierno ha asegurado que dichos activos se compraran a un precio razonable y la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría ha reiterado que la reforma “se ha diseñado para que no cueste un euro al erario público”.
Sin embargo, esta nueva “restructuración” se presenta ante nosotros como el mayor rescate bancario hasta la fecha y otra gran estafa a la ciudadanía. Al respecto varias consideraciones:
1) ¿Quién nos asegura que las parcelas, suelos, promociones sin acabar y urbanizaciones fantasma que absorberá el banco malo se comprarán a un precio razonable? Que se entiende por “precio razonable”?
Si la intención del banco malo es comprar activos para luego venderlos, el precio al que se compren y luego se vendan estos activos será clave para determinar el coste final para el contribuyente. Una de las hipótesis que se barajan es que los inmuebles sean transferidos al banco malo por su valor contable menos las provisiones ya realizadas sobre el activo que poseen en cartera (un colchón que los bancos están obligados a reservar para compensar la depreciación de los inmuebles). ¿Pero descontar la provisión realizada sobre el precio contable de los activos será suficiente para ajustarnos a su valor actual de mercado? Suponiendo que fuera así, que no lo es, y que, tal y como asegura el ministro De Guindos “los activos tóxicos de los bancos ya estuvieran suficientemente provisionados, con lo que el precio de compra podría ser reducido”, ¿por qué estos activos no encuentran salida en el mercado privado? ¿Por qué se transfieren entonces al banco malo? ¿Por qué nadie los quiere? ¿Por qué los tiene que comprar el Estado?